Cuenta un antiguo chiste: “-Vengo a comunicarles una trágica noticia: En el día de ayer murió el jefe, y con él se fue un excelente compañero… -Ah, pero…¿En el mismo día han muerto dos tíos de la empresa?” Lo cuento porque ayer murió Luís García Berlanga, y con él se ha ido, quizá, el más grande de los directores de nuestro cine, y un personaje divertidísimo. No, no murieron tres personas… una, única, que valía por tres, y por más...
Justo era, que comenzara con un chiste el obituario al rey de la tragicomedia española, pues le pega a la idiosincrasia del personaje, y le hace más justicia que si nos pusiéramos tristes por su pérdida, irremplazable, que no es de hoy, sino de cuando esa terrible enfermedad del Alzheimer se lo llevó a otro mundo, antes de morir.
Descanse en paz, el gran director de cine español (éste sí), autor de “Bienvenido Mister Marshall”, “Plácido”, “El verdugo” y “Calabuch”. Ahí es nada…
Luís García Berlanga: “Me considero un libertario, con la pena de no poder llegar a ser un libertino”
Tan grande, y tan genio era,
don Luís García Berlanga,
que con un corte de manga,
y este mundo por montera
eligió de esta manera
despedirse, hace ya días,
yendo con su enfermedad
rumbo a la posteridad,
aunque muriera ayer mismo…
Hoy se funda el “berlanguismo”
pero, sin continuidad.
Ya es penoso, madre mía,
que muriendo su maestro,
con él muera... la ironía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario