Me choca que desde las universidades catalanas se fomente, y se reclame “respaldo institucional” al yoga, que no deja de ser el conjunto de “prácticas de meditación en el hinduismo, el budismo y el jainismo, y que concretamente en el caso del hinduismo, se la cuenta como una de sus seis doctrinas ortodoxas para conseguir la unión del alma individual con Dios” (extraído de Wikipedia), y por el contrario en el mismo ámbito, se sea tan beligerante, con “las prácticas de meditación y de unión del alma individual con Dios” que utilizan la gran mayoría de las personas religiosas de este país (las católicas), persiguiendo, acosando y molestando a los alumnos que pretenden utilizarlas, lo que ha llevado a éstos a emitir un comunicado de protesta en el que se reclama poder hacer uso del servicio religioso con paz y tranquilidad:
Buscando el interior y su entresijo,
el "profe" nos relaja y entretiene.
Mirando al infinito un punto fijo,
tranquilas nuestras mentes nos mantiene.
Y con las piernas hechas revoltijo,
(que hacer el “giliyogas” nos conviene
mucho más que capilla y crucifijo),
aporta a nuestra mente mucha higiene.
¿Por qué querer rezar, buscando paz,
si no tiene de Oriente, su misterio,
ni se hace con el cuerpo ni un doblez?,
Quién sabe dice: "En la Universidad,
del yoga hay que exigir el magisterio",
que está de moda, tal gilipollez(1)…
(1) por gilipollez me refiero a utilizar prácticas de eminente contenido religioso, desposeyéndolas de toda significación, consiguiendo convertirlas en un mero ejercicio físico de buen rollito. Mantengo el máximo respeto para todas las religiones mencionadas, que no tienen ninguna culpa de la idiotez de algunos de sus involuntarios practicantes.
2 comentarios:
D. Intermitente, simplemente magistral. Enhorabuena.
Bien Hallado Amigo. Muy Buen Post como de Costumbre y sin Desperdicios.
Un Aplauso.
y como de Costumbre
¡¡RIAU RIAU!!
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